Nuestro compañero Carlos Alonso publica hoy un artículo exponiendo las ventajas y desventajas de trabajar gratis, un artículo que en la teoría puede sonar bien (aunque no puedo estar más en desacuerdo), pero en la práctica… no hay absolutamente ninguna ventaja. De hecho, un trabajo sin remunerar, no es trabajo.
Algunos puede que no estén de acuerdo con mi opinión, pero es que ya es un tema que está pasando a gris oscuro, pues algunas empresas no les basta con contratar un becario sin pagarle, sino que ya se están dando casos de tener que pagar por trabajar.
Para comenzar, por cada persona que está dispuesta a trabajar sin cobrar, está quitando un puesto de trabajo a una persona que necesita trabajar. En la teoría, el becario adquiere una experiencia laboral trabajando durante un tiempo en una empresa, y la empresa tiene la oportunidad de descubrir un nuevo talento para contratarlo más adelante si éste es de su agrado.
En la práctica, y en una época de crisis, la empresa, por regla general no tiene intención de contratar más adelante al becario por muy competente que éste sea, ya que básicamente la empresa ha buscado a esa persona para hacer un apaño temporal y que le ha salido muy económico. Los becarios son ideales para cubrir bajas por embarazo o vacaciones de los empleados, del mismo modo que sirven para aumentar la plantilla con mano de obra gratuita.
¿Descubrir nuevos talentos?
Supongamos que el número 1 de la universidad, el más competente, el más talentoso de todos los alumnos, tiene la mala suerte de haber nacido en una familia sin recursos económicos suficientes como para darse el lujo de trabajar sin cobrar. Si una empresa busca un profesional con talento, pero no está dispuesta a pagar un mínimo del salario a esa persona, puede dar lugar a terminar contratando a una persona cuyo único talento es disponer de medios económicos como para poder darse el lujo de trabajar sin cobrar. Por tanto, cuando no se le paga a un becario, no existe un filtro de talento, sino un filtro de recursos económicos.
¿Experiencia laboral como becario?
No generalizaré con esto, pues me imagino que cada empresa tendrá su sistema, pero existen muchas empresas que contratan a un becario cuya función a realizar no tiene nada que ver con la experiencia que se le va a exigir en la mayoría de las ofertas de trabajo.
Por otra parte, coincido con otros muchos empresarios en no llamar al «trabajo» de un becario experiencia laboral, sobre todo si se llega a conocer que éste trabajo se hizo gratis. Si nos vamos al mundo del periodismo, precisamente donde más se habla de las malas condiciones laborales y el aumento de las contrataciones de becarios, observaremos cómo ante la crisis que atraviesan los medios, están saliendo grandes profesionales de los periódicos mientras entran becarios al por mayor. Si buscáramos a un periodista para contratarlo (pagándole), ¿elegiríamos al becario o al profesional que estuvo durante años al frente del periódico?.
Pagar por trabajar.
Como todos sabemos, ahora se convalidan créditos por hacer prácticas en empresas. Algunas empresas ya están cobrando una tasa al becario por tener la oportunidad y el lujo de hacer las prácticas en esa empresa. Que me llamen retrógrado, pero pagar por trabajar con la finalidad de que convaliden algunos créditos, yo lo veo como la compra de un porcentaje del título universitario.
No obstante, esa convalidación de créditos es la única ventaja que en un momento dado le puedo ver al becario que trabaja sin cobrar. Claro que a los recién titulados hay que enseñarles algo desde que salen de la universidad, y es que un trabajo es remunerado y sólo hasta que una persona cobra por un trabajo, puede decir que ha tenido experiencia laboral, pues como dice el dicho: «A caballo regalado no le mires el diente».
Y repito, es mi opinión personal.