Qué bueno ¡Me voy de vacaciones!
Sin embargo, recuerda que otros se quedan con tu trabajo, además del suyo. Dependiendo de cómo les dejes el trabajo pendiente, te encontraras los problemas a la vuelta de tu descanso. Cuanto más colabores con tus compañeros, el regreso será más fácil porque habrán resulto muchos de nuestros problemas.
Pensemos en los compañeros facilitándoles el trabajo de manera que puedan adaptar su tiempo a sus obligaciones y a las derivadas de tú sustitución momentánea.
Planifica y ordena para la mejor gestión
Con independencia de los conocimientos que posee tu compañero sobre tus funciones, debes organizar y planificar el trabajo que debe realizar. Por contenidos, por tareas y por urgencia. Con ello, facilitarás la labor de investigación y evitaras errores que llevan más tiempo de resolver y generan mala imagen en la empresa o en los clientes afectados.
Explícale detalladamente conceptos y procedimientos. Además de especificar el nivel de urgencia de cada contenido. Cuanto más detalle realices sobre tus contenidos laborales, más facilitarás la labor de tus compañeros. Si tu compañero te detalla sus actuaciones, a ti te facilitará la comprobación de que ha realizado correctamente tus funciones.
Cuanto más interés pongas tú por tus tareas, el compañero tendrá más interés en realizártelas con la mejor manera posible, notando que tienen un interés fundamental para la empresa.
Es nuestro trabajo y nuestra responsabilidad.
Tú compañero solo te sustituye. Eres tú quien debe comprobar su eficacia y el resultado de sus sustituciones, corrigiendo los posibles errores que se hayan producido.
Esto habrá dependido de tu responsabilidad al dejar el puesto preparado para tu sustitución. Cuanto más detallado hayas dejado tu trabajo, menos errores se habrán producido.