Todo fracaso en la vida se define por una estrategia equívoca o poco estudiada. En algunos casos fracasamos por la evidencia de que comenzamos a andar sin saber hacia dónde nos dirigimos (Ya llegaré, aunque no se hacia dónde voy). En esta vida debemos marcarnos metas, en algunos casos metas ambiciosas pero siempre realistas y alcanzables.
Hoy, con la ayuda de Aida Baida Gil, autora de Coach de la Profesional, vamos a tratar de ayudaros a marcar unos pasos para agilizar la consecución de tus objetivos, y sobre todo para que sepas marcar unas metas claras y totalmente definidas.
1. Identifica lo que realmente quieres.
Antes de comenzar, debes saber identificar qué es lo que realmente quieres hacer en esta vida, ya que en muchos casos, tendemos a hacer las cosas por un antiguo instinto (El complacer a los demás). Lo que quieren tus padres, tu pareja, tu primo o hermanos, lo que ellos aprueban, no tiene por qué ser lo que realmente tú quieres. Busca algo con lo que disfrutes, algo por lo que sientas pasión y conseguirás que la lucha en busca de tu objetivo no te suponga una carga en tu vida diaria.
2. Busca el momento adecuado. HOY.
Gran parte de los fracasos se encuentran en el aplazamiento. Si los intereses de un crédito son la muerte del ahorro, el aplazamiento de tus sueños terminan generando comodidad en tu estado actual. El momento para luchar por tu sueño, por un cambio, no es cuando estés preparado, no es cuando te venga bien, no es cuando tengas fuerzas para comenzar, el momento adecuado no es el día 15 ni el 20. El momento adecuado para comenzar es hoy.
3. Define tus objetivos. Para que tus objetivos sean válidos y alcanzables, estos de ben ser:
- Específicos: Qué, cuándo, cómo y dónde. “Hacer más ejercicio” no es un objetivo específico. La alternativa podría ser “hacer 30 minutos de yoga tres días a la semana”.
- Realistas: Proponerte correr una maratón cuando no has hecho ejercicio en tu vida no sería realista, proponerte “correr los lunes durante 40 minutos” sí podría serlo.
- Factibles: Proponerte ganar un millón de euros en seis meses cuando acabas de empezar tu negocio, no parece muy factible (eso sí, si te ves capaz, a por ello). Lo ideal es dividir estos grandes objetivos en otros más pequeños que sean factibles, y así, poco a poco conseguirás la meta que te habías propuesto.
- Medibles: Tienes que saber cuándo has conseguido tu objetivo. “Ganar más dinero” es un mal ejemplo de medible, la alternativa sería “ganar 1500 euros” por ejemplo.
- Tiempo definido: Ponerte una fecha límite conseguirá que te centres y esfuerces más por conseguir tu objetivo. Así, siguiendo el ejemplo anterior, puedes sustituir “ganar 1500 euros” por “ganar 1500 euros en tres semanas”.