Theo Hernando y Ricardo Gil, ingeniero técnico agrícola y aparejador, comenzarán a producir agua de niebla a partir de septiembre. Ambos emprendedores idearon y patentaron en 2008 estos prototipos de captadores de niebla en forma de prisma y fabricados con fibra de vidrio y estructura de aluminio, con los que conformarán el primer ‘huerto hídrico’ con captadores tridimensionales del mundo.
Los prototipos están instalados a 1.600 metros de altitud en Gran Canaria, siendo la idea vender el agua de niebla embotellada tanto a hoteles, tiendas gourmet y del mismo modo destinarla para ayudar a combatir los incendios forestales, ya que puede almacenarse en los montes.
Estos captadores son totalmente ecológicos, no generan impacto visual ni ocupan mucho espacio, y la actividad que desarrollan no consume energía ni genera residuos, por lo que esta idea de negocio figura entre los cinco proyectos que concurren al Premio Biodiversidad en la categoría de emprendedores.