9 Errores en el lenguaje corporal que te pueden costar el trabajo.

El primer paso para superar una entrevista de trabajo es centrarse en evitar algunos errores comunes en el lenguaje corporal.

Cuando alguien se dispone a comenzar sus andadas en el duro trabajo de encontrar empleo, debería, en primer lugar, aprender las principales técnicas del lenguaje corporal (igualmente útiles para las negociaciones y otros aspectos de la vida en general).

Probablemente no importe nuestro curriculum o experiencia laboral cuando acudimos a una entrevista de trabajo, ya que finalmente seremos contratados por la sensación que le transmitiremos al seleccionador de la empresa. Una mala impresión y estamos fuera. Un simple error y adiós a la posibilidad de trabajo en esa empresa.

Supongamos que tu carta de presentación es perfecta, tienes un currículum envidiable. Has dedicado días enteros a estudiar la empresa y sabes incluso lo que te van a preguntar, teniendo las respuestas más que estudiadas. Respondes perfectamente, pero te olvidas de sonreír, te retrepas en la silla, o te muerdes las uñas, etc… sencillamente has sido descartado cuando probablemente seas el más apto para el puesto de trabajo.

Imagen: Careerminds

Una persona genera decenas de señales no verbales en cualquier situación.

Cuando estamos frente a un seleccionador de Recursos Humanos, que ya de por sí está buscando esas señales, estaremos generando cientos de señales. Es más, en cuanto hemos entrado por la puerta, ya hemos generado una impresión simplemente por nuestro aspecto físico y nuestra forma de vestir o caminar.

(Leer: Esta entrevista de trabajo sí es surrealista y con un curioso final)

¿Cuales son los errores en el lenguaje corporal que debemos evitar?

En esos aproximadamente 2 metros desde la puerta hasta la silla probablemente ya hemos generado nuevas impresiones sobre si estamos nerviosos, somos seguros o hemos entrado con inseguridad.

1. No invadas el espacio personal del entrevistador.

Cuando hablábamos de las técnicas de lenguaje corporal decíamos que no había que permitir que invadieran nuestro espacio en una entrevista grupal o negociación. En este caso, si llevas maleta o abrigo, no lo coloques encima de la mesa ni uses la percha del director si no te pide que cuelgues tu abrigo en ella.

2. No cruces los brazos.

Muchos candidatos saben que no deben retreparse en la silla y cruzar los brazos, pues denota pasividad. Claro que cuando estamos inclinados hacia delante y cruzamos los brazos, lo que mostramos es «pasotismo».

3. Jugar con el pelo.

Tanto en hombres como en mujeres (muy especialmente en mujeres) el jugar con el pelo se puede interpretar de muchas formas, y ninguna de ellas positiva. Además de otras señales, puede mostrar un carácter infantil.

4. Sentarse en mala postura.

Siéntate siempre con la espalda recta. La forma de sentarnos dice mucho sobre nosotros, y por regla general, una postura del cuerpo asimétrica cuando estamos sentados puede hacerte parecer confundido, desorientado y deshonesto.

5. Sonríe.

No hablamos de que te parezcas al primo tonto de Tom Cruise. No importa lo seria que sea la empresa. Debemos mostrar un carácter alegre, pues un carácter demasiado serio que ne ocasiones se confunde con amargura, no creo que hoy día guste a nadie.

(Leer: Mis 3 entrevistas de trabajo más surrealistas)

6. Falta de contacto visual.

Quizás sea uno de los errores de lenguaje corporal más graves y que muchas personas traen de serie. Precisamente las personas que no son capaces de mantener un contacto visual, suelen ser tímidas y muy poco de fiar, y en algunos casos mentirosas.

Tanto si es por timidez como por «poco de fiar», en principio no gusta a las empresas. Y se tiene muy en cuenta al haber muchos estudios probados sobre las personas que les cuesta mirar a los ojos.

(Leer: 40 habilidades que deberías poner en tu curriculum)

7. Demasiado expresivo.

Algunas personas no pueden evitar el mostrar todas y cada una de las sensaciones que perciben debido a sus gesticulaciones. Desde levantamientos de cejas hasta gestos con los ojos y muecas con la boca. Aunque es muy complicado controlar las micro-expresiones, vamos a intentar evitar las más graves.

8. Demostrar inquietud.

Morderse las uñas, mover el pie como si estuvieras pisando un acelerador continuamente o hacer «ruiditos» dando toques con la mano son gestos que se pueden interpretar de cientos de formas. De hecho, no se saben cómo interpretar. A las empresas les gustan las personas activas pero no hiper-activas, así como les gustan las personas que son capaces de mantener la calma en situaciones de estrés.

9. Las manos a la vista.

No escondas las manos debajo de la mesa. Mantenlas siempre sobre la mesa sin invadir demasiado espacio.

Lo cierto es que la mayoría de errores que se comenten con respecto al lenguaje corporal en una entrevista de trabajo son debidos a la inseguridad y nerviosismo, que en ocasiones se intensifica al no haber ensayado con antelación.

Debemos tener en cuenta que cuando vamos a una entrevista de trabajo, vamos a una obra de teatro, donde debemos hacer un papel, pues el entrevistador hará otro papel. (hablaremos de esos papeles en otro momento).

Ensaya en tu casa el cómo entrarás y saldrás de una habitación. Cómo saludarás y cómo te despedirás del entrevistador. Ponte frente al espejo a la hora de elaborar las respuestas ante las preguntas que crees te podrán hacer.

Ensaya incluso la sonrisa, la forma de sentarte, etc… no dejes nada al azar. Hay muchos candidatos para el puesto, así que intenta ser perfecto en la ejecución de tu papel.

• Los expertos revelan cómo escribir la carta de presentación perfecta
• 6 juegos mentales que emplean los reclutadores en las entrevistas de trabajo
• Directores de recursos humanos revelan los motivos más importantes por los que rechazan candidatos