En la actualidad se le intenta buscar una patología a toda conducta, o lo que es igual, considerar enfermedad un hábito concreto ante la aparente imposibilidad de corregir ese hábito. Un escocés de 57 años, llamado Jim Dunbar, ha sido la primera persona en el mundo diagnosticado oficialmente con «tardanza crónica», según recogía El Confidencial. Una patología que no está reconocida por el manual de desórdenes psiquiátricos en el que se basan para diagnosticar enfermedades mentales, pero que sí podría ser la causa/consecuencia de otro tipo de trastornos.
Todos conocemos a alguna persona que llega tarde a todos sitios, independientemente del día y la hora, tanto en las reuniones de empresa como a nivel personal. Si bien hasta ahora se ha podido considerar una falta de respeto hacia los demás, en el momento que entra dentro de una patología, el impuntual pasaría a considerarse un enfermo al padecer, según el grupo de psicólogos escoceses que han diagnosticado la «tardanza crónica», alguno de esos otros trastornos:
- Narcisismo: las personas narcisistas siempre esperan convertirse en el centro de atención, por lo que llegar tarde y tener la sensación de que algo no comienza hasta que ellos llegan, digamos que es una forma más de conseguir ser el centro del universo.
- TDAH (Trastorno por Déficit de Atención por hiperactividad). Este trastorno ya es algo más serio y que en ocasiones termina afectando incluso a las relaciones con familia y amigos. Suelen ser más impuntuales que el resto, pero no lo hacen por falta de respeto.
- Impulsos inconscientes. Hay personas que suelen ser impuntuales, sencillamente porque no les es posible ser puntuales por factores ajenos a ellos, y no hablamos de poner excusas. Sobre todo debido al trabajo.