Una de las empresas más importantes de Donald Trump, Trump Entertainment Resorts, acaba de declararse en quiebra.
Trump Entertainment es una compañía que se dedica a construir y operar casinos y hoteles en Las Vegas y Atlantic City. Fundada en 1988, fue uno de los negocios más rentables del millonario Donald Trump.
Esta compañía fue la que ayudó a Trump tras su anterior quiebra durante la crisis inmobiliaria del 92, que dejó a la Organización de Trump al borde de la bancarrota, a expandir su negocio de bienes raíces hacia otros sectores.
Pero ni Donald Trump, considerado un gurú de los bienes raíces, es inmune a los problemas de gestión empresarial. Y hoy, la empresa que le ayudó a salir de la crisis hace más de 20 años, es la que ha estado poniendo en peligro todo su imperio, por lo que ha solicitado la quiebra al tribunal de quiebras de la corte de Delaware.
Donald Trump no está atravesando su mejor momento. Y no sólo hablamos de sus empresas, sino de su reputación personal, pues Trump es el foco de miles de demandas por estafar a personas a través de la venta de cursos de inversión en bienes raíces que prometen hacerte rico en unos meses.
Las técnicas de venta de crece-pelo aplicadas a los bienes raíces llegan a tener unos desorbitados precios de hasta 35.000 dólares por recibir unos cursos inservibles y completamente falsos sobre la construcción de riqueza en la inversión en inmuebles.
No obstante, esta quiebra es únicamente un ejemplo de cómo todo empresario de éxito también tiene sus fracasos y sus baches económicos.
Leer: Trump y Kiyosaki: en qué momento tus ídolos pasan de inspirarte a utilizarte.