Son muchos los factores que influyen para alcanzar el éxito profesional dentro de una empresa, y me atrevería a decir que algunos de ellos incluso pueden escapar a nuestro control. El caso es que hay trabajadores que cuando llegan los recortes en la empresa, suelen ponerse más nerviosos que el resto, mientras que otros reciben un aumento de sueldo o un ascenso en el organigrama empresarial.
Luego tendríamos un tipo de trabajador intermedio, que incluso puede ser una persona válida en su trabajo, pero aún así, ve como otros suben mientras él se mantiene en el mismo sitio. Y esta persona, probablemente esté cometiendo algunos de estos errores que vamos a ver a continuación.
En primer lugar, algunos de esos factores que podrían escapar en cierto modo a nuestro control, ya los vimos cuando hablamos de la regla del 50-30-20. Y es que puedes hacer el mejor trabajo del mundo, pero si el encargado de reconocerlo no te conoce, es como si no hubieras hecho nada. En ese artículo hablábamos de que las habilidades sociales te dan el 50% del éxito en tu carrera profesional frente al únicamente el 20% que representaría el trabajo duro.
También vimos cómo tu apariencia física puede llegar a impactar incluso por delante de tu talento y habilidades.
Incluso si estás haciendo un excelente trabajo, estos errores en ciertas acciones y decisiones podrían impedir ese ascenso o aumento de sueldo en la empresa.
1. Dedicas tu tiempo y esfuerzo, pero los resultados….
Hay mucha diferencia entre ir a trabajar y hacer un buen trabajo. Muchos trabajadores van cada día a trabajar y desempeñan su labor, pero no agregan mucho más valor a la compañía. Cada vez más, las grandes empresas no miden tanto el tiempo y esfuerzo dedicado a la empresa, si no los resultados obtenidos y medibles por la compañía. Por tanto, mejorar tus habilidades profesionales y convertirte en un intra-emprendedor en la compañía es una de las mejores formas de ver traducido tu esfuerzo en un aumento de sueldo.
2. Te comparas con el resto.
En ocasiones, algunos empleados válidos piden un aumento de sueldo usando el discurso de comparación de habilidades con respecto a sus compañeros de trabajo. Si bien pueden estar en lo cierto y efectivamente ser mucho más competitivos, la verdad es que rara vez queda bien de cara a la gerencia. Habla de ti, no del resto, y obtendrás mejores resultados.
3. La falta de respeto y modales hacia compañeros y jefe.
Aunque fueras el mejor profesional de la empresa, el ser desconsiderado, tener poco respeto hacia tus compañeros o malos modales, no acabará derivando en un ascenso, porque si una compañía se precia a sí misma y quiere mantener una buena armonía en la empresa, nunca ascenderá a un gilipollas. Cada vez más, las compañías son conscientes de las consecuencias de tener a personas tóxicas trabajando en la empresa, pues pueden contagiarlo todo y cargarse a todo el grupo de trabajo. Aún siendo un excelente profesional, no es rentable para el cómputo global el tener a una persona tóxica.
4. Hacer lo justo.
Hacer lo justo y lo que se te ha encomendado, hoy día es poco, y por tanto, no deriva en un ascenso. Si quieres un aumento de sueldo o un ascenso, deberás demostrar que contribuyes más allá de lo básico, más allá que el resto de tus compañeros. Si no quieres quedarte corto y quieres ir a lo seguro, sé el mejor con una diferencia enorme con respecto al segundo que te siga.
5. No eres un trabajador de equipo.
Algunos empleados son excelentes en lo que hacen, pero son una especie de lobos solitarios que trabajan mejor solos. Y no hay nada de malo en ese comportamiento, salvo que quieras ascender, porque cuanto más subes en el organigrama, más sentimiento de equipo y empresa se necesita. Hoy día, la nueva cultura de empresa pregona el sentimiento de equipo y ya no gustan los lobos solitarios.
6. Amenazar con irte para conseguir un ascenso o aumento.
Algunos trabajadores son conscientes de la labor que han hecho en la empresa, y seamos realistas, pues no siempre se asciende a la persona más indicada (los enchufes existen), por lo que esta persona amenaza con irse y llevarse su trabajo, sus habilidades, su talento a la competencia. Gran error; vete o quédate, pero nunca amenaces con irte para lograr un aumento, pues se puede volver en tu contra al poner en aviso una intención de tomar una acción que aún no has ejecutado.
Finalmente, debes dar un motivo válido.
Cuando te reúnes para hablar de un aumento de sueldo o un ascenso, hay que venderse como un buen producto, y como todo buen producto, debemos dar unos buenos motivos al comprador. La gente accede a las peticiones únicamente si tienen un motivo para hacerlo, no siendo válida la negociación agresiva o alardes de fuerza en este caso, porque pocos trabajadores llegan a ser imprescindibles en una empresa.
El tener una cultura de empresa y el hacer que te vean como parte del futuro y avance para la compañía, suele ser uno de los mejores motivos para que incluso te den un ascenso sin pedirlo. Y para ello, debemos demostrar unos resultados medibles y progresivos que marquen una tendencia alcista en el tiempo.
Por último, si crees que no te valoran como te mereces o que no te compensan como crees que te has ganado, y observas que la situación no va a cambiar, en tus manos está el demostrar tu valía desde otra posición fuera de esa empresa.