Muchas empresas se quedan estancadas con sus productos iniciales, viendo cómo éstos perecen en ventas o cómo son adelantados por los de la competencia por la falta de mejoras. Hoy día vivimos en un panorama altamente cambiante, donde si no estás en movimiento constantemente, te quedas desfasado en el mercado.
Una de las premisas de Steve Jobs era: «si no estás naciendo constantemente como empresa, estás muriendo rápidamente».
Según la biografía de Steve Jobs, de Walter Isaacson, una vez al año, Jobs se llevaba a un retiro a sus empleados más valiosos, a los que llamaba «el Top 100», elegidos de acuerdo a un criterio muy sencillo: «era la gente a la que te llevarías si solo pudieras quedarte con 100 empleados en una barca salvavidas para tu siguiente empresa».
En esa barca estaría la gente más creativa de la empresa, aquellos que tienen ideas para el futuro de la empresa, para anticiparse a la competencia, e incluso, en el caso de Apple, anticiparse al propio consumidor.
En aquellos retiros se debatían todo tipo de ideas, y al final, Jobs se plantaba frente a una pizarra y preguntaba: «¿Cuáles son las próximas 10 cosas que deberíamos hacer?».
Imagen: Fearless Genius |
Tras muchas disputas y debates, el grupo se quedaba con una relación de 10 ideas. Entonces, Steve Jobs tachaba las 7 últimas y anunciaba: «Pongámonos a trabajar en las 3 primeras».
Gracias a estos retiros, Apple dejó de ser únicamente una empresa de ordenadores personales, y pudieron anticiparse a otras industrias que necesitaban un cambio: como por ejemplo la música, donde Jobs fue un visionario para darle una alternativa a las discográficas ante la piratería, gracias a la creación de iTunes, y Apple dejó de ser una empresa de ordenadores para sacar al mercado nuevos productos como el iPod, el iPhone o el iPad, siendo el iPod el producto que reinventó Apple.
Tim Cook, el heredero del puesto de Jobs, ha seguido haciendo estos retiros con los empleados más creativos, y Apple ha continuado siendo una empresa que nunca ha dejado de innovar, por lo que esta forma de pensar y de darle el poder a los empleados más inteligentes, es la que hace que Apple sea la empresa más valiosa del planeta en estos momentos, con 726.000 millones de dólares de capitalización bursátil.
Sin duda, un procedimiento sencillo de una gran empresa que es fácilmente «copiable» por cualquier pequeño negocio.
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