La negociación perfecta es aquella en la que ambas partes salen beneficiadas, aunque la realidad indica que en una negociación siempre hay una parte que sale más beneficiada que la otra o sencillamente, necesita que la negociación termine con éxito para el beneficio de la empresa. Algunos consejos para introducirte en el arte de la negociación.
1. En muchas ocasiones, debes saber ceder o perder para posteriormente situarte mejor y ganar. Sobre todo en los comienzos, no es bueno ser rígido en una negociación, debiendo ser flexible hasta adquirir fuerza.
2. Recuerda este dicho durante una negociación: » En una negociación, como en cualquier aspecto de la vida, eres dueño de tus silencios y exclavo de tus palabras». Quizás sea más importante escuchar a la otra parte. De esta forma recogemos información para procesarla y atacar a sus necesidades.
3. No es aconsejable que en un primer contacto de la negociación intervengan directamente los máximos responsables de la empresa. De esta forma, si se falla o no se llega a un acuerdo, siempre tendrás una segunda oportunidad para convocar una nueva reunión alegando que la persona que negoció en principio no conocía todos los detalles.
4. Si bien hablamos de la importancia de ser flexible y saber ceder, suele ocurrir cuando estamos interesados en dicha negociación que terminemos cediendo demasiado. Para estos casos, existe un dicho muy español: «En una negociación, como en cualquier aspecto de la vida, cuanto más te agachas, más se te vé el culo (con perdón)»
5. Mantén la calma en momentos de tensión durante la negociación. Eso demuestra incoscientemente a la parte contraria el dominio de la situación. En una negociación, el primero que pierde los papeles, pierde el control no sólo de su persona, si no de toda la negociación.
6. Adjunto al punto número 5, si en la negociación, tus oyentes no son sordos, mantén un tono equilibrado de voz. La exaltación no conduce a ningún sitio y levantar la voz, sólo significa que no tienes nada importante que decir. Nunca pierdas las formas ni mucho menos la educación.
7. Recuerda que cuando en una negociación no surgen dudas, preguntas o inconvenientes dando lugar a una negociación increíblemente sencilla, no significa que hayas hecho un buen trabajo. Probablemente, lo que ocurre es que la otra parte no tiene pensado cumplir con los acuerdos a los que se ha llegado.
8. El éxito en una reunión de negociación no llega por casualidad ni por azar. El éxito se planifica estudiando cada punto al milímetro. En este artículo aconsejamos cómo garantizarte un mayor porcentaje de éxtio en una reunión de negociación.