Probablemente, uno de los sueños más contradictorios de las personas sea ese que algunos libros nos inculcan, con el mensaje «Retírate joven y rico». Es contradictorio por la sencilla razón de que aquello que te convertirá en rico será exactamente aquello que te impedirá retirarte.
La mayoría de los millonarios no tienen pensado retirarse, según una reciente encuesta de Spectrem Group, una firma de investigación de la riqueza. Una pequeña minoría, únicamente se plantearían retirarse una vez pasada la edad de 70 años, y a pesar de que muchos se podrían haber retirado a los 40 como se dice en algunos libros, ni siquiera se les pasó por la cabeza en su momento. ¿Por qué?.
Irving Kahn, de 108 años |
Existen muchas razones por las que los ricos no piensan en retirarse. La primera razón sería que no tienen necesidad, pues para ellos, lo que hacen no es exactamente un trabajo, hacen aquello que les gusta y apasiona. Suelen estar muy involucrados en sus negocios, por lo que es normal que un empresario con 80 años siga tomando decisiones activas en su compañía, asistiendo a las juntas y tratando los problemas verdaderamente importantes.
Son personas de acción y el ser personas de acción fue lo que les convirtió en lo que son. Por tanto, nadie se imagina a Berkshire Hathaway con Warren Buffett viendo la tele en el salón de su casa o jugando a la petanca en un parque.
Otros piensan que su empresa es su mayor creación y no se plantean ni por un momento dejar de gestionar personalmente la compañía. Algunos de ellos dicen estar retirados ya que ahora sólo trabajan 5 días a la semana en lugar de 7 días.
Por tanto, ¿qué perfil de persona querría hacerse rico y retirarse joven?
Estamos hablando evidentemente de un perfil de persona que busca el pelotazo rápido en los negocios, ese pelotazo que con esa mentalidad rara vez se consigue dar. Para tener éxito en los negocios se necesita mucho trabajo duro y constancia, por lo que rara vez una persona que ha conseguido su sueño, lo abandona para retirarse. El millonario es una persona inconformista por naturaleza, por lo que siempre querrá crecer y ganar más. El conformismo es la cara opuesta de la riqueza, y por tanto incompatible.
Si intentas alcanzar el éxito en los negocios a través de algo que no te gusta, disminuyes considerablemente la posibilidad de alcanzar el éxito, y si consigues el éxito en los negocios haciendo algo que te gusta, ¿por qué querrías dejar de hacerlo?
Las ganas de retirarse joven y rico aumentan conforme disminuye el grado de satisfacción con nuestras vidas en general y con el trabajo en particular, por lo que no es una cuestión de retirarse para ser más feliz y tener una vida más completa, sino una cuestión de disfrutar con aquello que hacemos.
Es cierto que se suele vender que el secreto del éxito consiste en crear ingresos pasivos para que nos generen dinero de por vida sin necesidad de intervención por nuestra parte. Pero los ingresos pasivos como tal, no existen, y en el peor de los casos, también pueden fallar. Es por eso que siempre intento cambiar la palabra ingresos pasivos por ingresos redituables, y este tipo de ingresos no están exentos de un plan B. Es más, para mí, la construcción de unos ingresos pasivos no es sinónimo de riqueza, sino un apoyo para la construcción de la riqueza, al ser una de las formas que tenemos de incrementar nuestros ingresos para lograr el gran capital.
Y acabo diciendo que Irving Kahn, el inversor más longevo de Wall Street con 108 años, ha participado en esta encuesta y asegura que no tiene pensado retirarse por ahora. Es más, morirá pulsando la tecla de compra o venta de acciones.