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10 brillantes lecciones de negocios de Ben Horowitz.

El nuevo libro de Ben Horowitz no está escrito por un escritor, académico o periodista, sino por un empresario, ex-director general y exitoso inversor de riesgo. Ya hablamos de Ben Horowitz, co-fundador de Andreessen Horowitz y de su libro «The Hard Thing About Hard Things«, y publicamos un artículo haciendo referencia a la cara más amarga de comenzar tu propio negocio, según este empresario.

En esta ocasión, Morgan Housel, columnista del sitio web Fool.com, ha extraído 10 lecciones de negocios que aparecen en este libro, y que son fruto de la larga e intensa experiencia empresarial de Horowitz, el cual sabe lo que se siente al fallar, despedir personal, ver cómo tu empresa pierde todo el valor, perder el sueño, vomitar e incluso, en ocasiones, llorar dada la tensión que se produce en el funcionamiento de la empresa.

Si crees que emprender tu propio negocio va a ser un camino de rosas, probablemente la profesión de empresario no sea para ti. Esa es la premisa principal de Horowitz, el cuál sabe de lo que está hablando.

Estas serían las 10 lecciones de negocios que Housel extrae de este libro.

1. No hay atajos para adquirir el conocimiento, especialmente el conocimiento que se obtiene de la experiencia personal. Siguiendo la sabiduría convencional y confiar en atajos puede ser peor que no saber nada en absoluto.

2. En mi experiencia como director general, he aprendido que las decisiones más importantes como empresario son más una prueba de valor que de inteligencia.

3. ¿Quieres tener éxito como empresario y como empresa? – Cuida a las personas, los productos y los beneficios. Pero debes hacerlo en este orden.

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4. Toda la energía mental que usas para elaborar tu miseria sería mucho mejor usada para tratar de encontrar el camino para salir del caos actual. Dedica un 0% de tu tiempo en lo que podrías haber hecho y no hiciste. Dedica un 100% de tu tiempo en lo que puedes y vas a hacer, porque al final, a nadie le importa. Simplemente dirige tu empresa.

5. La gente no recuerda todos los días que trabajó para tu empresa, pero seguro que recordarán el día en que fueron despedidos. Recordarán cada detalle de aquel día y los detalles importan mucho. La reputación de tu empresa y directivos dependerán de ti, puesto en pie frente a los empleados que confiaron en ti y trabajaron duro para ti.

6. Estar en buena compañía. No importa cuando las cosas van bien, pero puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte de tu empresa cuando las cosas van mal.

  • Las cosas siempre salen mal en algún momento.
  • Rodearse de «buena compañía» es un fin en sí mismo.

7. No juegues a las probabilidades. Cuando estás construyendo una empresa, debes buscar la respuesta y encontrarla. No importa si tus probabilidades son de una contra nueve. Tu tarea es exactamente la misma.

8. Como empresario debes ver siempre el mundo a través de diferentes prismas. Eso me ayudó a separar los hechos de la percepción. Esta capacidad adquirida me sirvió increíblemente más adelante, cuando me convertí en un empresario y CEO. Muchos problemas los solucioné buscando explicaciones y soluciones desde perspectivas radicalmente diferentes a mi punto de vista.

9. La situación en la que te encuentras es probablemente todo culpa tuya. Tú contrataste a la gente, tú tomaste las decisiones. Pero tú sabías que el trabajo era peligroso cuando lo tomaste. Todo el mundo comete errores, y cada CEO comete cientos de errores. Castigarte por ello no te ayudará, pero debes ser lo suficientemente inteligente como para saber que la culpa es únicamente tuya.

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10.  Vivirás con impotencia el hecho de que en ocasiones los trabajadores más inteligentes pueden ser los peores trabajadores en tu empresa, así como saber que las estadísticas para el éxito como emprendedor están en tu contra. Pero ese es el camino que elige el emprendedor.

A. Carlos González
Autor de "Cenizas de Prosperidad", Apasionado de las ventas, las finanzas, estratega empresarial, entusiasta del desarrollo personal y algunas cosas más

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