En la actualidad recibimos constantemente mensajes embellecedores acerca de emprender: es lograr la libertad (aunque en los inicios del emprendimiento la libertad será una utopía); es despedir a tu jefe (ahora cada cliente será tu jefe); y es independencia financiera (aunque tu cuenta bancaria va a pender de un hilo durante los próximos meses). No te equivoques. Emprender es duro y no tienes resultados de éxito garantizados.
«Las próximas 10 semanas de tu vida serán la etapa más miserable de tu triste y penosa existencia».
Esas fueron las palabras de un instructor dirigidas a 32 marines de los mejores francotiradores seleccionados entre la élite estadounidense, según cuenta el ex-marine Jake W, actual presidente y fundador de Team Rubicon.
Probablemente esos dos meses y medio sean la más dura y difícil preparación para cualquier soldado. Muchos trabajan y estudian durante años para tener la oportunidad de asistir a estas pruebas, en las que de antemano saben que los van a preparar para un tipo de dolor en el que incluso siendo 32 condecorados marines, las estadísticas muestran que más de la mitad no consiguen graduarse con éxito.
Aún así, el porcentaje de fracaso es mucho menor que el que muestran las estadísticas de fracasos a la hora de iniciar un negocio propio. Recordemos que más del 80% de los nuevos negocios fracasan antes de los 3 años de creación.
El instructor te da una «motivadora» explicación el primer día:
«Vamos a llevarte a tu límite absoluto. Vamos a poner a prueba tu resistencia física en formas que no puedes ni imaginar. Vamos a privarte de comida, sueño y probablemente de tu cordura. Os enseñaremos a calcular el viento y a disparar bajo presión, y te distraeremos e incordiaremos para intentar que falles. Todo lo que vivirás será una prueba, y en el momento que falles, estás fuera. Si tienes el honor de graduarte en esta escuela, estarás listo para defender a tu país y a tus compañeros en cualquier campo de batalla.»
Asegura Jake W que el instructor no mentía. La prueba final de aquella escuela de francotiradores fue la experiencia más difícil de toda su vida, pero afirma que después de aquello, se sintió preparado física, mental y emocionalmente para la situación que más adelante vivió en Afganistán.
Durante los 7 meses que estuvo en la guerra, dice haber encontrado un sinnúmero de desafíos aparentemente insuperables, como la escasez del agua, numerosos y feroces tiroteos sin previo aviso, toma de decisiones de crítica importancia y todo tipo de problemas, pero por suerte, el duro entrenamiento le sirvió para tener la suficiente preparación emocional, mental y física para tener éxito en sus misiones.
¿En qué se parecen los emprendedores a los marines?
¿Qué tienen en común la preparación y situación de combate de un francotirador con el desafío de la iniciativa empresarial?.
Para comenzar, el éxito en cualquiera de estas dos disciplinas requiere de una cuidadosa preparación a través de 3 áreas como son: física, mental y emocional.
«Vamos a prepararte para el dolor llevándote a tu límite absoluto«
El fracaso de la mayoría de nuevos empresarios viene sobre todo de la falta de preparación y de subestimar los problemas que pueden llegar a aparecer. En un negocio, cuando quieres acordar, los gastos son más de los que calculaste, mientras que los beneficios son menores de los que imaginaste. Continuamente estarás llevándote a tu límite, ya que en ocasiones, sobre todo al inicio, se trabajan 16 horas al día los 7 días de la semana.
En los negocios, muchos están más que preparados para hacer un «sprint», pero, precisamente los negocios no son una carrera de velocidad, sino más bien una larga y agotadora carrera de resistencia. Mucho peor que una maratón.
Pondrás a prueba tu resistencia física, privándote de horas de sueño, pero tu cuerpo sólo aguantará esta situación si tu mente es dura como una roca. La preparación mental para emprender es muy necesaria, pues si los problemas iniciales consiguen agotarte, estás perdido tanto en los negocios como en el campo de batalla.
No es necesario que vayas a la universidad para comenzar tu propio negocio, pero vas a tener que aprender sobre negocios, estudiar todo lo relacionado con la industria, con las nuevas técnicas de marketing, las nuevas estrategias para vender en un mundo online, leer consejos de otros grandes empresarios y conocer lo mínimo que hay que saber de las empresas.
Jake W comenta que su grupo de francotiradores no eran buenos por casualidad. Mientras otros francotiradores sólo se centraban en disparar, ellos devoraban libros sobre conflictos afganos anteriores. Estudiaban su historia, su cultura. Querían conocer con exactitud el tipo de metodología que usaban para el ataque aquellas personas a las que se iban a enfrentar.
Tanto en los negocios como en el grupo de élite de francotiradores, no solo cuenta tu habilidad para luchar, pues el éxito dependía también de saber cómo luchaba tu adversario en su terreno.
La carga emocional puede llegar a ser debilitante. El estar al principio siempre al borde de fracasar al estar navegando únicamente entre dificultades, el no saber si podrás pagar las nóminas el mes siguiente, etc… no es nada fácil.
Ver: 55 Frases de negocios inspiradoras para emprendedores
Un francotirador y un empresario no deben perder el objetivo
A un francotirador se le prepara para apuntar a su objetivo y no perder la concentración, a pesar de estar en un escenario bélico, donde hay fuego cruzado, ruidos que hace que parezca que te van a reventar los tímpanos, pero el objetivo está puesto en su mira esperando a recibir la orden.
Un empresario debe actuar de la misma forma. Debe marcar un objetivo y no distraerse.
En resumen: La preparación es la clave para el éxito a largo plazo en cualquier campo de la vida. El estar preparado física, mental y emocionalmente te hace más fuerte, más resistente y más propenso a salir victorioso, tanto en un conflicto bélico como en la iniciativa empresarial.
Pero lo más importante es el propósito. Cuando un marine de los Estados Unidos está altamente agotado y prácticamente deshidratado, debe recodar por qué está bajo esos 50 grados de temperatura en mitad del fuego cruzado. En su caso es la misión por y para su país y sus compañeros que luchan junto a él.
En el momento que trasladamos esto al mundo empresarial, por tu bien, solo esperemos que cuando aparezcan las dificultades, el estrés y el agotamiento, tengas un propósito más allá que el ganar únicamente dinero.
QUE BUEN COMPARATIVO
MUY BUEN ARTICULO LOS FELICITO