Las medidas anti-crisis que se están estudiando en Estados Unidos podrían chocar con el planteamiento de soluciones que se están empleando en otros países del mundo, aunque en realidad, puede que sea el camino que se debería seguir en España para salir de la crisis. El planteamiento de Estados Unidos es olvidarse de los estudios financieros y usar el sentido común para crear empleo y generar confianza.
¿Qué están proponiendo en Estados Unidos?
Para comenzar, una de las grandes preocupaciones que existen en Estados Unidos, como en tantos otros países, es reducir el déficit público. Varios expertos en economía y mercado han puesto sobre la mesa una realidad, y es que si se reduce el déficit público dañando el bolsillo de los consumidores, el consumo se retrae y volvemos a la falta de rentabilidad de las empresas provocando un mayor desempleo y generando desconfianza hacia la nueva contratación.
Básicamente se está barajando la posibilidad de emplear una medida de «choque total», que es Aumentar un poco más el déficit público, pero generar creación de empleo y confianza del empresario.
¿Cómo se consigue esto?
Se plantea hacer todo lo contrario que se va hacer en España. Se plantea bajar impuestos a particulares y empresas, extender la prestación por desempleo, aumentar el capital destinado a ayudas de nuevos emprendedores y ofrecer ventajas fiscales y ayudas por nuevas contrataciones, además de un recorte en los impuestos de la nómina de un trabajador. Sencillamente, bajar la recaudación para que este dinero se emplee nuevamente en el consumo.
Problemas políticos a la vista.
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama sabe perfectamente que de emplear este tipo de medidas, podría costarle su puesto en la Casa Blanca, ya que el no reducir el déficit público y además, aumentarlo, sería el mayor argumento de su competidor político para conseguir sustituirle.
No obstante, algunos expertos en economía dicen que «para que algo mejore, a veces, la situación debe ir un poco a peor», aunque aseguran que este tipo de medidas generarían la confianza nuevamente del consumo al generar nuevos puestos de trabajo, por lo que a medio-largo plazo la economía remontaría por la propia inercia de la confianza en la recuperación del sistema.
Concienciar para cambiar los hábitos de consumo.
En Estados Unidos saben que un alto porcentaje de empresas, tomaron en sus días la medida de subcontratar la producción en países emergentes para disminuir el coste de los productos. Estas subcontrataciones han hecho daño al empleo estadounidense, por lo que se hace un llamamiento para cambiar los hábitos de consumo y que el propio consumidor premie al producto nacional fabricado y distribuído por personal del país.
Son conscientes de que la mano de obra en Estados Unidos es más cara que en India o China, por lo que se intentará llegar a un acuerdo con las empresas fabricantes en el tema de impuestos y se intentará concienciar al pueblo americano para que pague un poco más, ya que de esta forma se dará más trabajo a los ciudadanos estadounidenses.
Como podemos ver, son medidas que darían mucho de qué hablar, aunque no hay que descartar la validez del método para alcanzar el objetivo concreto: Generar confianza y aumentar el empleo confiando que el déficit público ya bajará por las nuevas cotizaciones y confianza del consumidor e inversor.
Brillante reseña! En mi opinión al electorado le interesa mas el déficit de sus bolsillos que el déficit del gobierno.
De todas maneras inteligentes las medidas que toma EE UU, sin dudas la formula perfecta para motorizar la economía y reducir el desempleo.