Después de varios días de tranquilidad en el que hoy es considerado el índice menos rentable del mundo, los valores del IBEX han vuelto a sufrir un tremendo batacazo, y ya no sólo lastrados por el miedo a la nacionalización de Bankia, sino que nuevamente surgen dudas sobre nuestro sistema financiero.
Los bancos han sido los protagonistas en todas las bolsas europeas, aunque el sistema financiero español, se ha puesto una diana en la espalda, ya que hoy día pocos creerían que tenemos el sistema financiero más saneado y sólido de Europa.
Europa vuelve al punto de partida y España un poco más hacia atrás.
Esa es la sensación que se vive en estos momentos, y es que todo el dinero que hasta ahora se ha inyectado a los bancos, ha sido insuficiente, aunque yo más bien diría inservible, por no decir dinero tirado, ya que nos hubiera salido más barato dejar caer a algunos bancos (con sus consecuencias).
Se nos ha unido la amenaza de Grecia con salir del Euro, mientras que los mercados ya tampoco confían en las medidas de austeridad, menos aún confían en una Europa poco austera, por lo que podríamos decir que incluso nos ha afectado el NO de Francia hacia la política de austeridad.
Esta mañana, a primera hora, conocíamos la noticia de que el Gobierno impondrá a la banca una nueva ronda de provisiones por valor de entre 20.000 y 40.000 millones de euros. Posteriormente, el presidente del Gobierno anunciaba que podría acudir al Fondo Europeo de Inversiones para que inyecte dinero al Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) porque no habría suficiente. Es decir, puede que se esté elaborando un nuevo plan de rescate financiero. En resumidas cuentas: Volver a destinar dinero público para ese enfermo crónico llamado sistema financiero.
JP Morgan también ha sido noticia, pues ha recortado fuertemente el precio objetivo de Bankia, mientras que Morgan Stanley ha bajado los precios objetivos de prácticamente todos los bancos de España.