Lo más importante somos nosotros mismos. Y ésto no es egoísta, pues para poder ayudar a otros, primero debes ayudarte a ti mismo y hacer cosas por ti mismo. Me explico mejor: incluso si quieres darle dinero a alguien, en primer lugar debes haber ganado dinero para ti, pues no puedes dar aquello que no tienes. Y ésto se aplica también para la felicidad. No puedes hacer feliz a alguien si eres infeliz.
Así que aprovechando que estamos a principios de año, que es cuando hacemos una gran lista de propósitos que por diversos motivos no llegas a cumplir, vamos a intentar que al menos hagas estas cosas por ti y por nadie más. Únicamente por ti mismo.
6 Cosas que debes hacer por ti mismo o para ti mismo.
1. Haz de tu propia felicidad una prioridad.
Por lo mencionado anteriormente arriba, debes hacer de tus necesidades tu mayor prioridad. Debes valorarte a ti mismo por encima de cualquier otra cosa.
Pero ojo, que en este punto lo tergiversan algunas personas para darle otro significado. No hablamos de que te conviertas en un «carpe diem» que comience a «pegarle» a todo lo que huele a fiesta o a beber porque la vida son dos días y hay que disfrutarla. Créeme que la vida son más de dos días, y ésta dura más de lo que tu cuerpo va a durar con ciertos excesos.
Simplemente hablamos de que satisfagas tus necesidades para que seas capaz de satisfacer y ayudar a esas personas que son importantes para ti.
2. Deshazte de tus etiquetas.
Divorciado, separada, enfermo, deprimido, trastornado [Inserta aquí la etiqueta que usas para flagelarte], y ahora bórrala. Todos llevamos la misma etiqueta: «Humanos». Aunque suene repetitivo, no somos nuestro pasado y no importa lo que ocurriera ayer. Lo único que realmente importa es hacia dónde vamos hoy y lo que hoy vamos a hacer para lograr que ocurra lo que deseamos conseguir.
Si ayer te rechazaron, no eres ese rechazo, sino todo lo que puedes lograr con lo que has aprendido con ese rechazo. Si queremos iniciar un camino hacia el futuro, debemos hacerlo ligeros de equipaje.
Debemos familiarizarnos con las palabras «Dejar ir», y por dejar ir, debemos dejar ir también las etiquetas que ayer nos definían. Vamos a darnos una nueva definición de nosotros mismos. Y si por ahora no se te ocurre ninguna, comencemos por «luchador».
Ver: 17 Duras verdades de la vida que debes saber.
3. Aprende a decir NO.
Ya sé que todos sabemos decir NO, pero vamos a aplicarlo. No a asistir a esos eventos a los que no queremos asistir. No a estar en un lugar que no nos gusta. No a complacer a personas que si se perdieran no importaría nada. Y sobre todo, dí No a esas personas tóxicas que tienen un control sobre tu vida.
Recuerda que el secreto del éxito es comenzar a decir Sí a casi todo (sí alas oportunidades, sí a las colaboraciones, etc…) y después comenzar a decir NO (No a las distracciones, no a lo que nos resta energía). Lo mismo ocurre en nuestra propia vida.
En la mayoría de los casos, no decir que NO es como decir SÍ a un montón de cosas que no nos apetecen.
4. Comienza a ponerle pasión a lo que haces.
Como ya he explicado en diferentes vídeos y artículos, si no puedes dedicarte a lo que te apasiona, intenta que te apasione aquello a lo que te dedicas, pues si no logras eso, va a ser difícil que algún día puedas dedicarte a tu pasión. Y ésto es complejo de explicar, cosa que prometo hacer.
Supongo que ya sabrás la enorme diferencia que existe entre la fatiga vacía y el cansancio gratificante. Uno acaba contigo, mientras que el otro, te renueva.
Para aquellos que se preguntan cuál es el secreto para encontrar tu pasión, lo cierto es que nunca me han servido los miles de consejos cliché que escuché. Así que aquí resumí lo que en mi experiencia personal creo que es la mejor forma para encontrar tu pasión. Espero que te sirva.
5. Perdónate por tus malas decisiones.
Debo repetir este punto, pero es que hasta las buenas personas pueden dañar a alguien en algún momento dado de su vida debido a una mala acción o mala decisión. No puedes cargar con esa culpa toda la vida. Todos cometemos errores. Tú también. Pide perdón a quien tengas que pedirlo, pídete perdón a ti mismo y suelta la carga. No dejes que eso te defina más tiempo del necesario.
6. Y perdona a los demás.
Sólo a las personas que tienen una clara intención de cambio y mejora. Esto no es un mensaje espiritual ni nada por el estilo. Es simplemente que en muchas ocasiones he sido testigo de cómo personas de gran valor nunca recibieron una segunda oportunidad por un pasado algo difícil. Si alguien hubiera creído en esas personas, probablemente hubieran tenido la oportunidad de cambiar, de deshacerse de esas etiquetas.
De la misma forma que a nosotros no nos gustaría que nos recordaran por un mal acto, cuando veamos intención de cambio, perdonar es lo más sabio, pero, pero, pero….
Tampoco quiero que tergiverséis ésto, pues una cosa es perdonar y otra es dar esa segunda bala a una persona porque la primera no nos mató. Al menos en mi caso cuando alguien ha traspasado esas líneas que le advertí que nunca pasara, puedo perdonar sus actos, pero ya lejos de mí.
El perdón no significa olvidar. Significa que aceptas lo ocurrido y sigues adelante con tu vida.
Son pequeños cambios que debemos hacer en nuestra vida, pequeños cambios en nuestra forma de pensar. Pequeñas acciones que pueden tener grandes cambios en nuestra vida. Un pequeño comienzo para este 2019.
Y bien, como sabéis, intento buscar el equilibrio entre lo escrito y lo audiovisual, por lo que la segunda parte de este artículo está grabándose y la subiré a nuestro canal de YouTube. Así que síguenos ahí para no perdértela.