El juzgado de primera instancia Nº 57 de Madrid ha ordenado el embargo preventivo de siete fincas, propiedad de Nueva Rumasa, solicitado por Inversiones Insulares Radó, debido a una demanda contra los Ruiz Mateos por impago de una operación de venta de hoteles.
Rumasa a su vez ha procedido a denunciar a Inversiones Insulares Radó por incumplimiento de contrato. Es evidente que Nueva Rumasa, que ya tuvo que ejecutar un ERE, y la cual ya se está viendo afectada por las huelgas de sus propios trabajadores, descontentos por el impago de nómimas atrasadas, no está atravesando su mejor momento.
Nueva Rumasa continua buscando capital externo e intendando obtener liquidez con la venta de participaciones de algunas de sus empresas.
Los medios de comunicación siguen sin dar noticias acerca de Nueva Rumasa y lo poco que se sabe es a través de los diarios en internet y noticias de los propios trabajadores y proveedores, donde ya se auguran malos presagios para esta empresa que ha intentado por activa y por pasiva levantar el vuelo.