Son muchos los errores que cometemos cuando se trata de dinero, y es que manejar correctamente las finanzas personales requiere de hábitos, pautas y algunos conocimientos sobra las estrategias que vamos a seguir.
Aunque en España la figura del planificador financiero no tiene aún la importancia que debería, lo cierto es que en Estados Unidos, este profesional asesora no sólo a empresas, sino también a parejas con dos tipos de perfiles: Las que han acumulado mucha deuda y quieren quitársela de encima, y las que quieren hacerlo todo correctamente desde el principio para tener unas finanzas saneadas.
Sin olvidar nuestro anterior artículo: Los 6 malos hábitos financieros más comunes, veamos algunas otras cosas que puede nunca hayamos pensado.
7 Errores en finanzas que cometemos a menudo.
1. La importancia de un presupuesto anual en lugar de mensual.
Hay muchas personas que se organizan un presupuesto mensual, donde saben el dinero que van a destinar a compras, el pago de las facturas y lo que pueden gastar en ocio y ahorrar. Un planificador financiero te diría que el presupuesto debe ser anual, marcando ya la cantidad que debemos tener ahorrada a finales de año. Debemos tener en cuenta que tenemos algunos pagos que no hacemos todos los meses, como puede ser el seguro del coche, el impuesto de circulación, etc… y contar con un dinero que debemos apartar para imprevistos cada mes. Si no se gasta, traspasamos ese dinero a un fondo de emergencia. Cada 3 meses, hacemos como las empresas, que es revisar nuestros resultados para saber si estamos cumpliendo objetivos.
En diferentes estudios financieros se ha demostrado que las personas que tenían un presupuesto anual, conseguían ahorrar mucho más que las que tenían un presupuesto mensual.
2. Gasto excesivo en vivienda.
Se suele decir que es muy complicado salir adelante si el pago de nuestra hipoteca es más de 1/3 de nuestros ingresos. En España, muchas personas pagan de hipoteca incluso más del 50% de sus ingresos, y eso dificulta y merma seriamente nuestras posibilidades de ahorrar para un futuro. No es mala idea probar durante un par de años a modo de alquiler hasta tener algunos ahorros que nos puedan dar la tranquilidad de enfrentarnos a una hipoteca.
3. No invertir o hacer malas inversiones.
El dinero hay que multiplicarlo, hay que sacarle rentabilidad. Realmente no es difícil hacerlo. Únicamente requiere de unos mínimos conocimientos de finanzas e inversión. No tengo nada en contra del tenis, fútbol o la fórmula1, pero si mucha gente pusiera el mismo interés a un mínimo de educación financiera que el que le prestan a los deportes, habría muchos menos problemas económicos. El no tener ese mínimo de conocimientos hace que muchas personas huyan de la renta variable, pero acaban firmando el contrato de un producto de inversión mucho menos rentable y más arriesgado que la bolsa, además de no tener el control sobre su inversión. Aprende lo mínimo en estos temas. Insisto en que no es nada complicado siempre que le pongas un mínimo de interés.
4. La trampa de las tarjetas de crédito.
Existen muchos tipos de tarjetas de crédito, incluso ahora existen tarjetas que te devuelven dinero por tus compras. Esto hace que cada vez usemos más el crédito de la tarjeta. Con respecto a las tarjetas soy contundente: No las quiero, aunque cuando tienes una situación económica precaria, quizás sea bueno tener una por si te puede sacar de un apuro temporal, pero paga siempre a final de mes la deuda de la tarjeta. La mayoría de las personas no son conscientes de la muerte financiera que provocan las tarjetas de crédito. Sólo toman consciencia cuando el daño ya es muy grave. (Tarjetas de crédito: El mayor enemigo del ahorrador)
5. No saber comprar, no negociar.
¿Cuándo fue la última vez que negociaste el precio con un dependiente?, probablemente no lo hayas hecho nunca, ya que si vas a comprar un traje, el cual tiene una etiqueta que dice que vale 450€, pues lo compras y lo pagas.
Conocí a un empresario que siempre quería mínimo un 5% de descuento sobre el precio que marcaban las etiquetas, sobre todo de ropa, y si la compra era masiva, siempre conseguía un 10% de descuento. Para él, las rebajas eran todo el año. Una vez le pregunté si no era demasiado «cutre» hacer eso.
Me preguntó si yo tenía un plan financiero. Le respondí que no, así que me dijo: «cuando lo tengas, hablamos». Según él, los negocios se llaman negocios o comercios porque se comercia y se negocia. En su empresa, los clientes le negocian para conseguir buenos precios. ¿Acaso una tienda de ropa con márgenes de ganancia amplios no puede negociar?. Era evidente que sí, pues siempre se salía con la suya. Decía que de esta forma tampoco perdía la práctica.
Y con respecto a no saber comprar, hay productos que compramos todas las semanas y que tienen una fecha de caducidad muy elevada, como pueden ser productos de limpieza o papel higiénico. Es aconsejable comprar estos productos al por mayor, para tener todo el año. De esta forma conseguimos mejores precios.
(Leer: 10 ideas para ganar dinero ahorrando)
6. Ganar dinero de una sola fuente.
Si no tenemos ningún activo redituable, lo que se denomina en finanzas como ingresos pasivos, el tener únicamente una fuente de ingresos, es cuanto menos, peligroso. Primero porque nos adaptamos al sueldo que ganamos, puede que no nos de para ahorrar suficiente, pero es que si te echan del trabajo, la situación empeora drasticamente. En breve publicaremos numerosas ideas de negocio para ganar un dinero extra.
En otras ocasiones, el principal problema es estar toda la vida en la misma fuente, y es que muchas personas se adaptan a un puesto de trabajo que no les gusta, pero les genera seguridad económica. En ese momento, es cuestión de plantearse si realmente compensa hacer toda la vida algo que no nos llena.
7. En este punto debería estar el dichoso problema de la deuda, pero llevamos toda la semana hablando de la deuda y los problemas que conlleva. Si tienes un exceso de deuda, crea un plan financiero a tu medida para quitarla lo antes posible. No hace falta que te vayas a vivir a una furgoneta como hizo Ken Ilgunas. Para los que comienzan, deben tener muy claro que con respecto a la deuda, cuanto menos mejor, sino es como financiación para crear un negocio. Y si la deuda pasa del 8% de interés, mucho cuidado.
Saber ordenar las finanzas es algo sumamente fundamental y mucho más en tiempos de crisis como el que vivimos en la actualidad. Poder equilibrar los ingresos con los gastos e inversiones posibilita el ahorro a partir de la evasión de deudas innecesarias.
No creer en tus posibilidades. Encuentro a un montón de gente que no se creen capaces de llevar a cabo un proyecto relacionado con el aumento de capital. lo ven imposible, y ni siquiera lo intentan. Para mi este es el octavo error. 😉
Saludos Carlos,
Totalmente de acuerdo, Gerard. A veces nuestro peor enemigo es nuestra propia mente.
Un saludo, Gerard!!